miércoles, 19 de noviembre de 2008



TEJIDO ANIMAL


El tejido celular es un conjunto asociado de CELULAS de la misma naturaleza, DIFERENCIADAS de un modo determinado, ordenadas regularmente, con comportamiento FISIOLOGICO y ORIGEN EMBRIONARIO comunes.





tejido epitelial: esta formado por celulas especializadas que forman una capa continua que cubre la superficie corporal o reviste cavidades unternas. Puede tener una varias de las siguienmtes funciones: protección, absorción, secreción y sensación. Los epitelios del cuerpo protegen las celulas profundas contra lesiones mecánicas, sustancias químicas nocivas, cuerpos extraños y la desecación.


Entre los ejemplos de tejido epitelial tenemos la capa externa de la piel, el revstimiento del tubo digestivo, el de las vías respiratorias y los túbulos renales.

De acuerdo a la forma de las célulsa y su función, los tejidos epiteliales se encuentran divididos en: epitelio plano o escamoso, cúbico, cilíndrico, cilíndrido ciliado y estratificado pavimentoso.


















tejido conectivo: se encuentra constituido por celulas ampliamente separadas que dejan entre ellas espacios ocupados por una sustancia enerte llamda matriz producida por la misma célula. Según el tipo de sustancia antra celular segregada por estas células, se pueden diferenciar varias clases de tejido conectivo. Entre los cuales podemos encontrar: tejidos especializados como el cartilaginoso, el óseo y el sanguíneo; y poco especializado, como el tejido adiposo (grasa).





tejido muscular: el movimiento realizado por casi todos los animales se logra por la contracción de células alargadas y cilíndricas, llamadas células musculares; estas células contienen pequeñas fibras contractiles y paralelas miofibrillas, formadas por las proteínas miosina y actina. Estas células musculares se encargan de realizar un trabajo mecánico al contraerse, en cuyo acto acortan y ensanchan.

En el cuerpo humano hay tres tipos de tejido muscular: el estriado, el liso y el cardiaco. El musculo estriado representa las grandes masas musculares unidas a los huesos del cuerpo (a veces se le llama musculo esqueletico); el musculo liso se encuentra en las paredes del tubo digestivo y otros órganos internos y el musculo cardiaco forma las paredes del corazón.







tejido nervioso: Está compuesto por células denominadas neuronas; estas neuronasse especializan en la condución del impulso nervioso.
Estas células presentan una región ensanchada denominada cuerpo celular, encargado de alojar en su 9interior un grupo de organelos celulares como son el núcleo, los cuerpos de Nilss y el Citoplasma celular.
Las neuronas, a partir del cuerpo celular, presentan delgada prolongación que puede variar de longitud y termina en forma ramificada. Esta prolongación es enominada axón y las finas ramificaciones se llaman teledendrones.
Si las neuronas forman parte del sistema nervioso periférico, se van acaracterizar por presentar su axón envuelto por una célula denominada vaina Schwann o neurilema; estas, a su vez, (dependiendo del tipo de fibra nerviosa), pude estar envueltas en un material aislante graso denominado mielina.


TEJIDO VEGETAL


Al igual que en los animales, las células vegetales se agrupan para formar tejidos especializados y que se encuentren divididos en: tejidos meristemáticos o jovenesy en tejidos adultos o permanentes.



tejido meristemático: está formado por células pequeñas de pared celular delgada con núcleos grandes y escasas vacuolas. Su principal función consiste en crecer, dividirse y diferenciarse, dando origen a los tejidos adultos.

La planta, durante su período embrionario, esta formado enteramente por tejido joven. Éste, según va creciendo, se diferencia en otros tejidos; pero, aun en al planta adulta, hay regiones con tejidos jovenes o meristemas quer permiten el crecimiento continuo. Los meristemas pueden ser primarios y secundarios.


Los meristemas primarios se encuentran en las partes de la planta que crecen activamente (ápice de raíz y tallos) el meristema de los extremos finales de las ramas y las raíces es llamado meristema apical, responsable del crecimiento en longitud. Los meristemas secundrios o laterales representados por el cambium, son los responsables del aumento en grosor de los tallos y raíces.

El tejido adulto o permanente, a su vez, se encuentra dividido en: tejidos epidermicos, tejidos parenquimatosos o fotosinteticos, tejidos mecánicos y tejidos conductores.


tejido epidérmico: Está formado por células que recubren el cuerpo de la planta. Por su posición superficial, el tejido epidermico ésta sujeto a modificaciones estructurales relacionadas con el ambiente. Las células epidermicas son, a menudo, de forma tubulkar y sus paredes estan diversamente engrosadas; esto permite la protección de las células subyacentes contra la desecación o las lesiones mecánicas.








tejido parenquimatoso: es un tejido simple y poco diferenciado que, a veces, se halla asociado con otras células distintas para forma tejidos complejos. Se encuentra formando por la corteza y médula de los órganos cilíndricos (tallo y raíz) y en las hojas. Está integrado por células vivas, de forma variable es un tejido metabólicamente muy activos, relacionado con la fotosíntesis y el almacenamiento; por ser potencialmente meristematico interviene en la cicatrización de lesiones estructurales.



tejidos mecánicos: Este grupo encierra a los tejidos encargados de darle a la planta sostén y resistencia mecánica. Entre los principales tejidos mecánicos tenemos al colénquima y el esclerenquima.

El colenquima esta formado por células vivas ubicadas debajo por debajo de la epidermis de los tallos y las hojas. Su principal función es ia de ofrecer sostén a los órganos en crecimiento y a los órganos adultos de consistencia herbácea.

El esclerénquima es un tejido compuesto por células muertas, por lo general, con paredes engrosadas uniformemente y su función es suministrar sostén y resistencia mecánica a los órganos de consistencia leñosa.

tejidos conductores: En las plantas encontramos dos tipos de tejidos conductores: el xilema, que conduce el agua y las sales disueltas (savia bruta), y el floema, que conduce las sustancias nutritivas procesadas (savia elaborada).

martes, 14 de octubre de 2008

LAS BIOMOLECULAS



Las biomoléculas son las moléculas constituyentes de los seres vivos. Los cuatro bioelementos más abundantes en los seres vivos son el carbono, hidrógeno, oxígeno y nitrógeno, representando alrededor del 99% de la masa de la mayoría de las células. Estos cuatro elementos son los principales componentes de las biomoléculas debido a que:
  • Permiten la formación de enlaces covalentes entre ellos, compartiendo electrones, debido a su pequeña diferencia de electronegatividad. Estos enlaces son muy estables, la fuerza de enlace es directamente proporcional a las masas de los átomos unidos.
  • Permiten a los átomos de carbono la posibilidad de formar esqueletos tridimensionales –C-C-C- para formar compuestos con número variable de carbonos.
    Permiten la formación de enlaces múltiples (dobles y triples) entre C y C, C y O, C y N, así como estructuras lineales ramificadas cíclicas, heterocíclicas, etc.
  • Permiten la posibilidad de que con pocos elementos se den una enorme variedad de grupos funcionales (alcoholes, aldehídos, cetonas, ácidos, aminas, etc.) con propiedades químicas y físicas diferentes.
    Según la naturaleza química las biomoléculas pueden ser:




  • Biomoléculas inorgánicas
    Son biomoléculas no formadas por los seres vivos, pero imprescindibles para ellos, como el agua, la biomolécula más abundante, los
    gases (oxígeno, dióxido de carbono) y las sales inorgánicas: aniones como fosfato (HPO4-), bicarbonato (HCO3-) y cationes como el amonio (NH4+).




  • Biomoléculas orgánicas o principios inmediatos
    Son sintetizadas solamente por los seres vivos y tienen una estructura a base de carbono. Están constituidas principalmente por
    carbono, hidrógeno y oxígeno, y con frecuencia están también presentes nitrógeno, fósforo y azufre; otros elementos son a veces incorporados pero en mucha menor proporción.
    Las biomoléculas orgánicas pueden agruparse en cuatro grandes tipos.

Glúcidos:
Los glúcidos (o hidratos de carbono) son la fuente de energía primaria que utilizan los seres vivos para realizar sus funciones vitales; la
glucosa está al principio de una de las rutas metabólicas productoras de energía más antigua, la glucólisis, usada en todos los niveles evolutivos, desde las bacterias a los vertebrados. Muchos organismos, especialmente los de estirpe vegetal (algas, plantas) almacenan sus reservas en forma de almidón. Algunos glúcidos forman importantes estructuras esqueléticas, como la celulosa, constituyente de la pared celular vegetal, o la quitina, que forma la cutícula de los artrópodos.


Lípidos:

Los lípidos saponificables cumplen dos funciones primordiales para las células; por una parte, los fosfolípidos forman el esqueleto de las membranas celulares (bicapa lipídica); por otra, los triglicéridos son el principal almacén de energía de los animales. Los lípidos insaponificables y los isoprenoides desempeñan funciones reguladoras (colesterol, hormonas sexuales, prostaglandinas).


Proteínas:
Las proteínas son las biomoléculas que más diversidad de funciones realizan en los seres vivos; prácticamente todos los procesos biológicos dependen de su presencia y/o actividad. Son proteínas casi todas las enzimas, catalizadores de reacciones metabólicas de las células; muchas hormonas, reguladores de actividades celulares; la hemoglobina y otras moléculas con funciones de transporte en la sangre; anticuerpos, encargados de acciones de defensa natural contra infecciones o agentes extraños; los receptores de las células, a los cuales se fijan moléculas capaces de desencadenar una respuesta determinada; la actina y la miosina, responsables finales del acortamiento del músculo durante la contracción; el colágeno, integrante de fibras altamente resistentes en tejidos de sostén.


Ácidos nucleicos:
Los ácidos nucleicos, ADN y ARN, desempeñan, tal vez, la función más importante para la vida: contener, de manera codificada, las instrucciones necesarias para el desarrollo y funcionamiento de la célula. El ADN tiene la capacidad de replicarse, transmitiendo así dichas instrucciones a las células hijas.
Algunas, como ciertos metabolitos (ácido pirúvico, ácido láctico, ácido cítrico, etc.) no encajan en ninguna de las anteriores categorías citadas.